La factura de la luz puede ser una de las mayores preocupaciones financieras de un hogar. Sin embargo, al mismo tiempo, muchas familias no se dan cuenta de que están pagando de más en sus facturas de electricidad debido a una falta de comprensión de cómo se calcula el coste de la energía eléctrica.
A continuación, te explicamos algunas de las mejores formas de determinar si está pagando de más en su factura de la luz y cómo puedes reducir el coste de tu factura energética.
La primera forma de saber si estás pagando de más en tu factura de la luz es comparando el precio que has pagado con el coste promedio de la energía eléctrica en tu área. Los precios de la electricidad varían según la región, por lo que es importante comparar su factura con las tarifas promedio de la zona en la que vives. Si su factura es significativamente más alta que el promedio, es probable que esté pagando de más.
Pero, ¿cómo se puede comparar tu consumo con el de tu zona? Pues es más sencillo de lo que muchas personas creen. La inmensa mayoría de los usuarios disponen en su factura en papel o en PDF un código QR personalizado que sirve para ir a la página web de la CNMC (Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia), donde aparecerá el gasto medio que realizamos en nuestra casa así como el que habríamos pagado en diferentes empresas según tu zona.
Si tu consumo de energía ha aumentado de manera significativa en los últimos meses, es probable que esto se refleje en tu factura. Sin embargo, si su consumo se ha mantenido constante, pero su factura ha aumentado, es probable que estés pagando de más, o que haya alguna promoción que haya caducado.
En estos casos, debes comprobar si existe alguna promoción de la que puedas beneficiarte y así volver al precio anterior. De nuevo, visitar la página web de la CNMC puede ser una buena idea.
Debes tener en cuenta de que siempre pagarás el término fijo de tu factura de la luz, con independencia de tu consumo energético. Si tienes más potencia contratada de la que necesitas, estarás pagando de más con total seguridad, sin realmente necesitarlo.
Pero, ¿cómo saber si tu potencia contratada se ajusta a tu consumo? Pues muy sencillo. Si haces un uso exhaustivo de los electrodomésticos, encendiéndolos al mismo tiempo, y no te han saltado los plomos nunca, probablemente tengas más potencia de la que necesitas. En este caso, tan solo tienes que bajar tu potencia y ajustar el consumo a tus necesidades para no pagar de más.
Si tienes una tarifa con discriminación horaria, pagarás un importe diferente en función del horario en el que enchufes los aparatos en el hogar. En este caso, durante 14 horas del día la energía suele estar un 40% más barata durante las horas valle, un periodo que se extiende de 22 a 12 horas en invierno y de 23 a 12 horas en verano. Fuera de este horario, en las llamadas horas puntas, el coste de la energía será más caro.
Por eso, si te encuentras en esta situación, lo ideal es aprovechar al máximo posible las horas valle, haciendo uso de los electrodomésticos y otros aparatos eléctricos por la noche. Por ejemplo, poniendo el lavavajillas, la lavadora o la secadora durante ese horario. Si tienes una tarifa con discriminación horaria y sueles encender los aparatos por el día, es probable que estés pagando de más.
El mercado eléctrico español está copado por unas pocas empresas. Sin embargo, desde su liberalización, cada vez son más las compañías que ofrecen sus servicios a los consumidores. Por eso, estar en una de las grandes empresas que componen el oligopolio eléctrico español posiblemente te haga pagar de más.
La razón es sencilla: las decenas de comercializadoras independientes que existen tienen muchas menos probabilidades de aplicarte precios abusivos, porque su buena relación con el cliente es crítica para ellas. Y, en la actualidad, existe mucha variedad: cooperativas de consumidores, pequeñas empresas locales o regionales, pymes dedicadas a esta actividad en exclusiva, filiales de grandes empresas de capital nacional, empresas eléctricas extranjeras…
En la web de la CNMC dispones del listado oficial y en los informes sobre el mercado minorista los detalles de cuotas de mercado. Recuerda que solo cambiará de manos el 3% del recibo; pero sin duda una migración masiva a este tipo de entidades contribuirá a que las empresas dominantes cambien su actitud.
Normalmente, todos nosotros podemos explicar un pico en nuestro consumo eléctrico, lo que puede hacer subir la factura de la luz. Pero si seguimos sospechando y algo no cuadra, una posible explicación es que alguien se haya enganchado a tu red. Sí, es una posibilidad que, aunque sea remota, debemos descartar.
Para comprobarlo, se puede seguir un proceso muy sencillo. Tan solo debes acudir al contador, ya sea en el cuarto de contadores si vives en una comunidad o en un lugar más accesible si es tu vivienda habitual. Una vez allí, hay que apuntar el consumo del contador en el momento en el que se revisa, bajar todos los magnetotérmicos que hay en la vivienda para evitar cualquier tipo de consumo y, pasados entre 15 minutos y media hora, acudir de nuevo al contador.
Si todo está correcto, el contador no habrá registrado ningún tipo de consumo. Si, por el contrario, el piloto sigue parpadeando, lo más probable es que tengamos alguna trampa enganchada. Además, si los valores siguen creciendo con la luz desconectada en casa, lo más probable es que haya alguna anomalía que hay que detectar.
