¿Estás pensando en hacer unas oposiciones? Cada año, miles de personas quieren entrar en el proceso de selección para conseguir un puesto de trabajo en la Administración Pública y se preguntan cómo estudiar oposiciones. Este proceso está regulado por un órgano estatal y recogido en el BOE (Boletín Oficial del Estado).Preparar una oposición suele conllevar una gran cantidad de tiempo y dedicación, sumado a la dificultad de volver a estudiar si llevas algún tiempo trabajando por cuenta ajena o propia. Sin embargo, puedes seguir los siguientes consejos para aprobar y conseguir plaza.Lee también: 8 claves para elegir un máster y no equivocarse
[caption id="attachment_13684" align="aligncenter" width="455"]
Infografía | Consejos para aprobar unas oposiciones[/caption]
Debes ser realista con los horarios que establezcas en tu día a día, estableciendo cuánto es el tiempo real que tienes para dedicarle al estudio y los meses que quedan hasta la prueba.Por lo general, es habitual dedicar al menos 12 horas diarias a estudiar el temario de la oposición, siempre realizando pequeños descansos para descansar la mente y que ésta procese y absorba la información.
Una vez seamos conscientes de cuánto tiempo tenemos hasta el día de la oposición y del tiempo que podemos dedicarle al estudio cada día, debemos marcarnos objetivos a corto y medio plazo en un calendario.Debes organizar el tiempo de forma racional y establecer objetivos que sean exigentes pero realistas, pues si estableces metas que no son alcanzables únicamente conseguirás frustrarte y abandonar el estudio.
Este consejo podría resultar obvio para cualquier estudiante, sin embargo, muchas veces no dedicamos el tiempo suficiente a simplificar el temario de manera que sea más asequible y más claro para memorizarlo.Lee también: 10 consejos para estudiar online a distancia y aprovechar el tiempo
Como paso anterior a la realización del resumen, subraya el temario, utilizando principalmente dos colores. Sí, solo dos: uno para las ideas principales o conceptos y otro para las secundarias, de forma que posteriormente plasmar estas ideas en un resumen sea sencillo y claro.
En la sabiduría popular hay una idea que refleja que cuando más aprendes sobre algo no es cuando lo escuchas o lo lees, sino cuando se lo explicas a otra persona. Puedes explicar el temario bien a un compañero, a tu familia si te lo permite, a tus mascotas o incluso al espejo, pero intentando aclarar los conceptos para que el interlocutor comprenda la idea que le estás trasladando. Con este truco aprenderás y memorizarás la información de manera mucho más sencilla.
Por ejemplo, puedes ir redactando preguntas en un folio aparte en la primera lectura que hagas del tema que hayas planteado estudiar en el día, de forma que, recogerás en el examen propio lo que, a priori, te parezca de mayor relevancia. Una vez que hayas terminado de memorizar la lección, intenta resolver tu propio examen y, si has fallado en alguna de las preguntas, repasa más esas partes concretas del temario.
Siempre que estés dentro del horario establecido para estudiar tus oposiciones, debes ser productivo. Evita la tecnología dejando lejos el teléfono móvil o la tablet, de forma que no pueda distraerte un mensaje que puede esperar a después. Intenta no justificar tener estos aparatos alrededor “por si necesitas ampliar información”. Si de verdad lo necesitaras, apúntalo en un folio y cuando acabes de estudiar, podrás dedicar tiempo a profundizar en estos temas.
Ya sea una persona cercana, un familiar o un amigo, debes tener una vía de desahogo que te apoye cuando tengas un mal día y no hayas conseguido cumplir los objetivos que te habías marcado. Gracias a internet puedes conectar también con personas que estén pasando por lo mismo que tú, ya sea con tu misma oposición o con otra, por lo que puedes encontrar grandes grupos de apoyo en las redes sociales. Eso sí, fuera del horario de estudio.
No puedes dejarlo para luego si esa mañana te levantas con sueño o autoengañarte con que si en el día no cumples tus metas, mañana “apretarás” y conseguirás el doble. Deberías tomarte el estudio para una oposición como si de un trabajo se tratase.Si te ayuda, imagina que tienes un malvado jefe que te despedirá si llegas tarde o te encuentra hablando por teléfono. No obstante, lo más sensato es ser consciente de que haces ese esfuerzo porque quieres lograr algo bueno para ti, aprobar tus oposiciones, de forma que si te pones auto-zancadillas, procrastinando, el único que saldrá perjudicado, serás tú.