Cuando compramos por internet asumimos un gran riesgo. Existen muchísimos cibercriminales que están atentos para poder interceptar las transacciones. Esto fue un gran problema hace unos años, y, para resolverlo, surgieron empresas especializadas en hacer que esas transacciones fueran fáciles y seguras. Actuaban como intermediario entre vendedores y compradores. A esas empresas, se las conoce como pasarelas de pago.
Existen muchas pasarelas de pago diferentes, aunque todas hacen más o menos lo mismo: hacer que las compras y ventas online sean fáciles y seguras, sin que ni vendedor ni comprador tengan que ser expertos en seguridad informática para que la transacción sea un éxito. Hoy vamos a ver cuáles son las pasarelas de pago más utilizadas en internet y qué beneficios ofrecen (porque, aunque todas se parecen, no son exactamente iguales).
En primer lugar, tenemos PayPal. Probablemente, esta sea la pasarela de pagos más conocida de cuantas vamos a mencionar a lo largo del artículo. Se trata de una plataforma utilizada por millones de personas en todo el mundo, nacida de la mano de eBay, pero escindida de este gigante del comercio electrónico hace ya algunos años.
PayPal permite realizar pagos en sitios web a través de su pasarela de pagos y también permite realizar transferencias de capital entre usuarios dentro de su plataforma. Tanto en un caso como en otro, tiene tarifas y comisiones que se aplican a las transacciones que se realizan a través de ellos. Estas tarifas y comisiones varían dependiendo de varios factores, como si se es particular o empresa o el país de origen y llegada de los fondos.
Estas tarifas y comisiones, cabe decir, pueden llegar a ser bastante elevadas en algunos casos. En cualquier caso, pese a estas comisiones y tarifas, lo cierto es que PayPal es una de las pasarelas de pago más utilizadas. Y no es para menos, puesto que ofrece muchas comodidades, especialmente a aquellas personas que no están bancarizadas (algo muy frecuente en, por ejemplo, países de Latinoamérica).
Stripe es el jugador más joven de esta lista, pero ha llegado para quedarse. Es la pasarela de pagos más utilizada por las nuevas empresas creadas en Silicon Valley, y ello es debido a que ofrece numerosas mejoras respecto a plataformas de pagos anteriores. Estas mejoras han hecho que los emprendedores del valle del silicio se hayan enamorado.
No es aquí el momento de mencionar todas las ventajas de Stripe respecto a otras plataformas (deberíamos dedicar un artículo entero para poder cubrir todas esas ventajas), pero basta con que entiendas que ofrece muchas facilidades tanto a los cobradores como a los pagadores, especialmente en lo referente a formas de pago e información y analítica sobre los cobros recibidos.
Después, tenemos Google Wallet. Google Wallet es otro de los grandes monederos online. Obviamente, ha crecido a base de meterlo a la fuerza en sus diferentes servicios. Pero, sea como sea, lo cierto es que lo utilizamos con cierta asiduidad y, por qué no decirlo, ofrece mucha comodidad en el día a día, porque recuerda tus datos y la seguridad que ofrece es alta.
Básicamente, es un sistema de pagos online al que puedes vincular tu tarjeta online (aunque también puedes utilizar su propia tarjeta, la Google Wallet Card. Lo normal es utilizar la tarjeta de débito propia, para tener un mejor control del dinero que gastamos y para no tener una cuenta adicional conectada a Google (aunque, por seguridad, quizá esta última sería la mejor opción).
Google permite, a través de Google Wallet, realizar transferencias de dinero y pagos entre diferentes usuarios. Cabe mencionar, también, la especial atención al usuario que proporcionan desde la compañía en este ámbito, tanto para los compradores como para los vendedores, sean minoristas o empresas. Así que, en este punto, hay que reconocer que Google lo está haciendo muy bien.
RedSys es la plataforma de pago con tarjeta más utilizada en España, puesto que la inmensa mayoría de las entidades financieras españolas la utilizan. Esto le permite contar con el respaldo y el acceso a la red de clientes de casi todo el sector bancario del país. Algo que no es poca cosa cuando pretendes ofrecer un servicio donde el efecto red es tan importante como es el servicio de pagos electrónicos.
Por lo demás, hay que reconocer que es un servicio que ofrece mucha personalización de cara al usuario vendedor. Además, es intuitiva y muy sencilla de utilizar, fácil de adaptar a tu negocio y con unos buenos sistemas de prevención del fraude y de las estafas. Por lo que es normal que su uso se haya generalizado (y no sólo por lo mencionado en el apartado anterior).
Por último, tenemos a Apple Pay. Lo cierto es que Apple Pay no es una pasarela de pagos como estamos acostumbrados a ver por internet, sino que es un sistema pensado para las ventas y compras físicas.
Se trata de una forma de pagar utilizando el iPhone, el famoso smartphone de la compañía. Básicamente, el usuario vincula la tarjeta el iPhone y puede pagar con el móvil en vez de con la propia tarjeta.
Esto se logra gracias a la App Wallet, que tienen todos los iPhones de última generación integrada y que permite realizar los pagos. No obstante, como decimos, no es una pasarela de pago al uso que podamos usar en internet. Está pensada para compras físicas. Sin embargo, por su importancia, hemos considerado importante mencionarla.
Como acabas de comprobar, existen multitud de pasarelas de pago entre las que elegir. Estas pasarelas de pago, hoy en día, se “incrustan” en las webs de forma muy simple y sin apenas conocimientos de programación, por lo que cualquiera puede hacerlo. Y, gracias a ellas, internet es un lugar mucho más seguro. ¿No es fantástico cómo los humanos somos capaces de detectar problemas y ponerles solución?
