Comprar una vivienda es una de las decisiones financieras más importantes que cualquier persona puede tomar en su vida, y más aún si lo hace firmando una hipoteca. La investigación del mercado, los cálculos, el estudio de las ofertas… ¡Comprarse una casa es toda una odisea! ¿Hablamos de los gastos asociados a comprar una casa?
Antes de tomar una decisión tan importante hay que sacar la calculadora y hacer números, muchos números, para tener claro qué casa te puedes permitir. El desembolso a realizar es muy grande y podría llegar a condicionar el resto de tu vida, así que mejor hacer bien los deberes.El problema es que a la hora de hacer estos cálculos, la mayoría de la gente no tiene en cuenta el coste real de la vivienda. Se quedan con el precio final de venta e ignoran que existen una serie de impuestos y gastos asociados de obligatorio pago que encarecen, y mucho, la operación. El importe total de estos gastos asociados a comprar una casa depende de dos factores: primero, el precio de la vivienda; y segundo, el importe de la hipoteca. Como es lógico, cuánto mayor sea el precio de la casa y el importe hipotecado, mayores serán los gastos.
Para empezar, la compra de una vivienda implica una serie de gastos vinculados al papeleo y al pago de impuestos que el comprador está obligado a sufragar. El importe total de estos gastos suele ser de alrededor del 10% del precio de la casa.Por una parte están los gastos de notaría, los gastos ocasionados por la inscripción de la escritura en el registro de la propiedad y los gastos de gestoría (este último te lo puedes ahorrar si eres capaz de hacer por ti mismo todos los trámites).Por otra, y estos son más importantes, los impuestos. Los impuestos que se pagan al comprar una casa dependen de si se trata de una vivienda de obra nueva o de una de segunda mano. En el primer caso habrá que pagar el IVA (10%) y el Impuesto de Actos Jurídicos Documentados (entre 0,5% y 1,5%, según comunidad autónoma).Las viviendas de segunda mano están exentas de IVA. En su lugar hay que pagar el Impuesto de Transmisiones Patrimoniales (ITP), que según la comunidad autónoma en la que esté ubicada la vivienda puede oscilar entre el 6 y el 10%. En este caso, hay tipos reducidos para jóvenes, familias numerosas y viviendas de protección oficial.
La financiación bancaria en forma de hipoteca no te va a salir gratis. A los intereses que pagarás durante toda la vida de la misma debes añadir una serie de gastos obligatorios que en la mayoría de los casos el banco exigirá que pagues con tus ahorros.El primero de ellos es la tasación de la casa, necesaria para que el banco conozca el valor real de la misma (la mayoría de entidades no prestan más del 80% de esa cantidad, aunque cada vez hay más flexibilidad en este aspecto).Además, como ocurre con la compraventa de la vivienda, también aquí incurrirás en unos gastos de notaría, de registro de la propiedad y de gestoría.Antes de contratar la hipoteca deberías tener en cuenta también algunos gastos ocultos. No son gastos en sentido estricto, o al menos no te los venden como tales, pero encarecen (y mucho) el importe total de la hipoteca.Nos referimos, principalmente, a las comisiones (de apertura, de amortización total o parcial…) y a los productos vinculados, como los seguros de vida y de hogar o los poco competitivos planes de pensiones que algunos bancos obligan a contratar.Como ves, los gastos asociados a comprar una casa no son pocos. Nuestro consejo es que no los pierdas de vista en tus cálculos si quieres evitar sorpresas y si necesitas una ayuda extra, no dudes en solicitar tu préstamo rápido en Vivus. Es muy sencillo y solo te tomar minutos. ¡Apenas hay papeleo!