La energía está por las nubes. ¿Qué te vamos a contar? Ya lo has notado en tus facturas de luz y gas. Carísimo todo. Y, ahora, viene el invierno. Así que, si no controlamos un poco el gasto, nos vamos a encontrar en una situación muy delicada. Es por ello que, hoy, te traemos 12 tips para ahorrar dinero en invierno.
Como verás, no son trucos muy complicados de aplicar. Eso sí, harán que tu día a día sea un poco más incómodo. Pero… ¡No queda otro remedio! Es eso o enfrentarse a facturas enormes que, a buen seguro, dificultarán tu posibilidad de llegar a fin de mes. Y eso es lo último que queremos. Así que te invitamos a que sigas estos consejos que te vamos a dar en los próximos apartados.
En primer lugar, si quieres ahorrar en tus facturas durante este invierno, es fundamental que te pongas más ropa. ¿Un buen consejo? Compra unos leggins y unas camisetas térmicas y ponte la demás ropa encima. Te sentirás calentito en casa sin sacrificar comodidad y casi no necesitarás utilizar la calefacción.
Como complemento a lo anterior, por las noches, puedes aprovechar para utilizar más mantas. Si estás viendo la tele en el sofá o en el ordenador, puedes utilizar una manta para no tener que encender la calefacción. Entre la ropa térmica y las mantas, te aseguro que no necesitarás encenderla.
Obviamente, si necesitas calentar la vivienda, tendrás que encenderlos. Pero puede que no te interese calentarla constantemente o, a veces, te interesará calentar algunas habitaciones y otras no. Apaga los radiadores que no uses y limita la calefacción. Por ejemplo, ¿necesitas que el lavabo esté a buena temperatura las 24 horas del día? No, ¿verdad? ¡Pues apaga su radiador!
Ahora bien, quizá no puedas apagarlos. Bien. Pues, en ese caso, no los tapes. Muchas personas utilizan los radiadores para secar ropa, por ejemplo. ¡Eso un terrible error! El gasto energético al hacer eso es enorme, porque el radiador caldea la vivienda mucho más lentamente. Así que no lo tapes. Deja que libere todo su calor tan pronto como pueda y, en consecuencia, la temperatura de tu hogar se alcance a la mayor velocidad posible.
El sol calienta. Así de simple. Sube las persianas y aprovecha las horas de luz solar para tener menos dependencia de la calefacción. De este modo, podrás ahorrar una buena cantidad de energía en las horas donde es más cara. Además, te dará más luz y te sentirás más cómodo en tu hogar.
Otro truco muy sencillo es pasar más tiempo fuera de casa. Puedes acudir más a bibliotecas, cafés u otros recintos que tengan su propia calefacción y donde no tengas que gastar dinero. Así, gastas menos en energía al mismo tiempo que aprovechas para hacer actividades que te gusten. Suena bien, ¿no?
Si vives en pareja, no dudes en aprovechar el calor corporal. Ropa térmica, manta y los dos juntitos en el sofá. Estaréis calentitos, gastaréis menos y os sentiréis más unidos, haciendo crecer el romanticismo en la pareja. ¿Qué más se puede pedir? Una buena peli y unas palomitas y lo tienes hecho.
El mediodía es cuando más calor vas a recibir de diferentes fuentes, así que es el mejor momento para ventilar. Con la ropa térmica, puedes tenerlo todo abierto a estas horas y no tener frío. Así que aprovecha estas horas para ventilar y limpiar la casa y apaga la calefacción. Apenas lo notarás.
En invierno, el suelo es lo que más frío está. Y si eres de los que disfruta andando descalzo por casa, lo notarás más que cualquier otra cosa. Una buena forma de afrontar esto es utilizando alfombras. Además, las alfombras conservan mejor el calor que el suelo, por lo que el termostato tardará más en saltar.
Por supuesto, si utilizas electrodomésticos eficientes, gastarás menos energía. Esto es fundamental. Sin embargo, no todo el mundo puede permitírselo, porque implica cambiar los electrodomésticos y eso, por supuesto, implica inversión. En este sentido, cámbialos poco a poco según vayas teniendo oportunidad, pero no te comas demasiado la cabeza. Los otros puntos de esta lista te permitirán ahorrar en el momento sin necesidad de invertir.
Por supuesto, tienes que revisar tus contratos de luz y gas. ¿Quién sabe? Quizá tienes algo contratado que no te interesa, que te sale más caro de la cuenta, y, simplemente, no te había hecho falta cambiarlo hasta el momento porque los precios no eran muy caros. Pero, ahora que la energía ha subido de precio, quizá sí te interese un cambio. Consulta ofertas y no tengas miedo de cambiar. Estás en tu derecho.
Por último, te recomendamos utilizar las horas valle. Como bien sabes, actualmente, en España, hay un sistema de horas punta y horas valle. Si utilizas electrodomésticos en las horas punta, el precio se dispara. Es cierto que esto sólo aplica para la electricidad, pero es que, en muchas viviendas, el agua caliente va por electricidad o se utilizan calefactores eléctricos (no deberías, son carísimos). Por tanto, asegúrate de usar los electrodomésticos durante las horas valle.
Como ves, tienes bastantes trucos para ahorrar dinero este invierno con tus facturas de luz y gas. Al final, todo se reduce a usar el mínimo de energía posible y aprovechar al máximo otras formas de calentarse, como la ropa o el propio cuerpo humano. ¿Volvemos a las cavernas? Puede parecer que sí… ¡Esperemos que el año que viene todos estos problemas se hayan solucionado!
