Dinamarca va camino de convertirse en el primer país de Europa en eliminar el dinero físico para los pagos en metálico en tiendas de ropa, restaurantes y gasolineras y otros negocios. La medida ya está en trámite parlamentario, se espera que se apruebe en los próximos meses y entrará en vigor a comienzos de 2016.[¿Necesitas una ayuda este mes? Solicita tu préstamo aquí] Según el gobierno danés, el dinero en efectivo pone demasiadas “cargas administrativas y financieras” en tiendas y actúa como un lastre para el crecimiento del PIB. De esta forma, eliminándolo se permitiría a los comerciantes ahorrar y aumentar su productividad.Además, dada la popularidad de los pagos móviles en el país (uno de cada tres daneses usa aplicaciones móviles tipo MobilePay para hacer pagos en negocios), los compradores también se verían beneficiados al desaparecer todos los inconvenientes asociados al manejo de billetes y monedas.Y lo más importante aún, con una decisión de este tipo será mucho más fácil para el Gobierno controlar el dinero en circulación. De esta forma, el blanqueo de dinero tendría los días contados y la economía sumergida se volvería simplemente impracticable. Las cajas B desaparecerían porque todas las operaciones de compraventa se realizarían con dinero bancario.No obstante, no todo son ventajas. La eliminación del dinero en efectivo no está exenta de riesgos. De entrada, basta señalar que esta iniciativa danesa cuenta con el respaldo del principal lobby financiero del país, Finansraadet. ¿Por qué? Muy sencillo: al desaparecer los billetes y monedas, la banca aumentará sus ingresos por comisiones y ahorrará en gastos de gestión.Por otra parte, no podemos obviar otros inconvenientes importantes, como el fraude electrónico, que se ha duplicado en el último año, la inversión obligatoria de los comercios en sistemas tecnológicos con los que tramitar estos pagos o los problemas ocasionados por el extravío de la tarjeta de débito o del teléfono móvil. ¿Cómo pagarán los daneses si esto les ocurre?En mi opinión, Dinamarca va por el buen camino. En un mundo en constante avance tecnológico como el actual, los billetes y monedas tienen los días contados. Sin embargo, mucho cuidado con como se implementa una sociedad con cobros y pagos basados exclusivamente en dinero bancario. Si no se empieza por regular el tema de las comisiones bancarias, podríamos llevarnos algunas sorpresas desagradables.
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