Siempre intentamos que nuestros lectores comprendan que las deudas pueden llegar a ser peligrosas. Una mala gestión de las mismas y un endeudamiento excesivo pueden tener consecuencias nefastas. Sin embargo, para determinadas compras e inversiones a veces son inevitables. Y vas a necesitar negociar con un banco si quieres conseguir financiación.Si necesitas dinero prestado y crees que el banco es el mejor lugar para conseguirlo, más vale que leas este artículo antes de mover un solo dedo. El negocio de la banca es prestar dinero pero eso no significa que tú seas un cero a la izquierda y que no tengas poder de negociación.[¿Necesitas una ayuda este mes? Solicita tu préstamo aquí]
El director de la oficina bancaria querrá saber en qué tienes pensado gastar su dinero. Sobre todo si eres autónomo y quieres el dinero para tu negocio, unos buenos argumentos te ayudarán a conseguir la financiación. Si aceptas un consejo, más vale que en el discurso no aparezcan las palabras “pagar otra deuda”.
Algunos pensarán que es una tontería, pero se equivocan. En el fondo, somos la imagen que mostramos a los demás. No hace falta que te pongas el mejor traje que tengas, pero si vas a pedir dinero, al menos trata de causar buena impresión.
A la persona que está frente a ti le tiene que quedar claro que sabes de lo que hablas. No puedes pedir dinero y no saber qué condiciones oferta el banco: modalidades de préstamos, tipos de interés, requisitos mínimos… No está de más que conozcas también lo que vende la competencia. Así, dado el caso, podrás negociar con más fuerza.
Tienes que tener muy claro que el banco quiere ganar el máximo dinero posible. Cualquier comercial de banca sólo buscará los mejores beneficios para la entidad que representa y le paga la nómina, por lo que cuántas más comisiones te cobre, más productos financieros te vincule y más alto sea el tipo de interés, mejor para ellos. Es clave que tengas esto muy claro antes de negociar con un banco.
Si se trata de tu banco habitual te resultará mucho más sencillo demostrar que eres un buen cliente. Puedes presumir de tus ingresos estables, de tus ahorros, de no haber tenido nunca la cuenta en rojo, de que no devuelves recibos… Aunque creas que el banco ya sabe todo eso, y realmente lo sabe, recuérdaselo.
Debes guardarte tu ego y aceptar cualquier tipo de crítica que te haga la persona que tienes delante. Es un profesional y su trabajo es dudar de lo que le dicen. Quizá tú estás siendo sincero pero no todo el mundo actúa de la misma forma. Su incredulidad está justificada.
Si el banco no accede a concederte el préstamo, no lo dudes ni un solo instante: llévate tu nómina a la competencia. Úsala también para negociar mejores condiciones en el caso de que el préstamo sea aceptado. Incluso puedes ofrecer la nómina de tu pareja o de algún familiar a cambio de unas mejores condiciones financieras para tu deuda.Aplicando estos siete consejos tendrás más probabilidades de conseguir la financiación. Y si no quieres complicarte la vida recuerda que en Vivus te podemos ofrecer tu primer crédito de hasta 300 euros con muy poco papeleo.Si necesitas una ayudita extra, en Vivus podemos ofrecerte un préstamo rápido de hasta 1.000 euros (300 si es la primera vez que lo solicitas) para poder hacer frente a cualquier imprevisto que te pueda surgir. Es muy sencillo y solo te tomará diez minutos. ¡Apenas hay papeleo!