¿Has oído hablar del Dollar Cost Averaging? Si estás metido en el mundo de la inversión, es probable que sí. Y si estás entrando y descubriendo este mundillo desde hace poco tiempo, es posible que hayas oído hablar del concepto, pero aún no tengas claro qué significa. No te preocupes. Eso va a cambiar hoy.
Ya te adelantamos que, sobre esta práctica, hay mucha discusión. Hay gente que dice que está muy bien y hay gente que plantea que es mejor la alternativa. En este artículo te vamos a mostrar ambos planteamientos y vamos a terminar dándote nuestra opinión. A partir de ahí, tú decides cuál es el mejor enfoque para tu caso particular.
El Dollar Cost Averaging es el sistema de inversión más sencillo para los novatos, porque te asegura que no tengas grandes pérdidas a lo largo del tiempo. Y, aunque el nombre pueda parecer algo complicado, lo cierto es que no tiene ninguna dificultad.
Sencillamente, consiste en hacer aportaciones periódicas a aquellos productos de inversión que utilices (independientemente de cuál sea ese producto de inversión, vehículo o activo).
Supongamos que tienes unos ingresos de 3.000€ y unos gastos de 2.000€ al mes. Te sobran 1.000€ y decides invertirlos mes a mes. Lógicamente, aquí estás haciendo un Dollar Cost Averaging forzado, porque sólo puedes invertir aquello que no necesitas para vivir mes a mes. De este modo, cada mes estás invirtiendo 1.000€ en los mercados, invariablemente.
Pues bien, ahora supongamos que te cae una herencia inesperada. Digamos que te caen, de golpe, 12.000€. ¿Cuál es la decisión correcta en este caso? ¿Invertir todo de golpe o invertir poco a poco?
La estrategia del Dollar Cost Averaging te dice que inviertas esos 12.000€ mes a mes a cantidades semejantes. Por ejemplo, podrías invertir 1.000€ al mes durante un año.
Este estilo de inversión tiene dos grandes ventajas: la primera, que desarrollaremos en el siguiente apartado, es que te permite evitar las grandes caídas del mercado. Imagínate que inviertes esos 12.000€ de golpe y, de repente, el mercado cae un 50% y no vuelve a recuperarse hasta cuatro o cinco años después. Es un problema, ¿verdad? Es mejor invertir 1.000€, tener la caída, pero, a partir de ahí, que cada 1.000€ nuevos que inviertas sí tengan una rentabilidad.
La segunda ventaja es que te permite abstraerte por completo de lo que sucede en los mercados. Tú te dedicas a invertir y ya está. Mes a mes. Te da igual si el mercado está caro o barato. Tú sabes que, invirtiendo cada mes, en el largo plazo no vas a perder dinero. Así que no tienes que preocuparte de hacer sesudos análisis de mercado para ver si está caro o barato.
Por supuesto, puedes aplicar variaciones a la estrategia del DCA.
Piensa que esta estrategia está pensada para que no te afecten las caídas. Sin embargo, puedes aprovecharla para maximizar las ganancias. O, al menos, para intentarlo. Por ejemplo, podrías no invertir esos 1.000€ al mes de forma constante, sino hacerlo en función del movimiento del mercado.
Por ejemplo, si el mercado sube un 10%, tú reduces un 50% la cantidad que inviertes. Si baja un 10%, aumentas un 50%. ¿Por qué? Porque, de esta manera, estás invirtiendo más cuando los precios están más bajos y menos cuando los precios están más bajos, consiguiendo (en teoría) a largo plazo una mayor rentabilidad.
Por supuesto, esto tiene sus limitaciones, porque perfectamente los precios podrían continuar subiendo mes a mes de forma invariable durante años y tú siempre estarías invirtiendo una cantidad cada vez menor (piensa, por ejemplo, en el NASDAQ).
Por lo tanto,aunque esta variación del DCA puede ser interesante para algunas personas a la hora de invertir, ya implica más conocimientos y es menos sencilla que el DCA normal.
Lo cierto es que no hay una respuesta clara a esta cuestión. Si coges datos históricos y estadísticos, encontrarás que suele compensar más invertir todo el dinero de golpe, porque, a largo plazo, estadísticamente, obtendrás mejores retornos que si apuestas por el DCA. Incluso en malos escenarios, donde el mercado cae justo tras entrar, a largo plazo, la diferencia no es muy acusada.
Sin embargo, a nadie le gusta invertir todo su dinero y descubrir que ha perdido la mitad al día siguiente. Y mucho menos le gusta mantener esas pérdidas durante una década. Es muy normal que, quien hace eso, se asuste y decida retirar su dinero en el peor momento posible, habiendo perdido la mitad de su patrimonio.
Además, siempre cabe la posibilidad de que, esta vez, la cosa no sea como en el pasado. Cabe la posibilidad de que, aunque recuperes lo invertido, tardes varias décadas, porque la Bolsa tarde todo ese tiempo en recuperar los niveles a los que entraste.
Y no es algo que no haya pasado antes: sólo hay que fijarse en el IBEX, puesto que aún no hemos recuperado los niveles anteriores a 2008. Y en el NIKKEI japonés ha sucedido algo parecido.
Por lo tanto, aunque estadísticamente parezca que tiene sentido invertirlo todo de golpe paraaprovechar la capitalización compuesta, lo cierto es que el DCA reduce mucho algunos de los riesgos más perjudiciales para el inversor. Incluso si se pierde cierta rentabilidad en el largo plazo, la diferencia será mínima. Y vale la pena asumirla por tener una mayor tranquilidad.
Como acabas de comprobar entender el Dollar Cost Averaging no es nada particularmente complicado. Simplemente, es una forma de inversión que se basa en invertir periódicamente para hacer una media del precio al que entramos al mercado.
Por supuesto, no es un remedio infalible, pero es un método más seguro que el invertir todoel dinero que tengamos de golpe, porque, en ese caso, corremos el riesgo de entrar en un pico de mercado.