Si has sido un buen contribuyente, tu declaración de la renta ya debería estar en manos de la Agencia Tributaria. Pero si eres un pelín despistado, has procrastinado con tus obligaciones fiscales y te acabas de dar cuenta de que aún no has presentado tu borrador de la renta, sentimos decirte que estás fuera de plazo. Si se te ha olvidado presentar la declaración de la Renta, vamos a hablar de lo que puede pasarte.
[¿Necesitas una ayuda este mes? Solicita tu préstamo aquí]
La campaña de la Renta 2019 comenzó a principios del mes de abril y se ha extendido hasta finales de junio. En concreto, el 27 de junio fue el último día para presentar la renta si el resultado era a ingresar con domiciliación en la cuenta bancaria. Para el resto de casos el plazo finalizó el 2 de julio.
A pesar de esto, la Agencia Tributaria permite a todos los contribuyentes que cumplan con sus obligaciones aunque sea fuera de plazo. Eso sí, hacerlo después de la fecha límite tiene sus consecuencias, que dependerán de si el resultado es a ingresar o a pagar y de si te has dado cuenta tú del error o de si ha sido Hacienda quién te ha requerido.
Si se te ha olvidado presentar la declaración y el resultado es a ingresar, es decir, si te toca pagar, y presentas tu declaración fuera de plazo sin que Hacienda te haya hecho un requerimiento oficial, tendrás que soportar un recargo que será mayor o menor dependiendo del tiempo que haya pasado.
Cuánto más tardes en presentar la declaración, mayor será el recargo. En concreto, pagarás un sobrecoste del 5% si presentas la declaración hasta tres meses tarde, del 10% si llegas hasta 6 meses tarde, del 15% hasta los 12 meses y del 20% a partir del año. En este último caso también tendrás que pagar unos intereses de demora del 5%.
En el caso de que seas un despistado de película y la AEAT haya tenido que contactar contigo para recordarte tus obligaciones tributarias, la sanción será mucho mayor. El recargo oscilará entre el 50% y el 150% de la cantidad a pagar dependiendo de la interpretación que se haga del artículo 191 de la Ley General Tributaria. Hacienda te perdonará el 30% de la sanción si no recurres la multa y otro 25% si pagas rápido.
Si has tenido suerte y el resultado de tu declaración es a devolver, es decir, Hacienda te tiene que dar dinero porque has pagado más IRPF del que te correspondía durante el año, también pueden pasar dos cosas en función de si Hacienda te ha hecho el requerimiento o de si has sido tú quién te has percatado del despiste.
Si no ha habido requerimiento oficial, no hay prejuicio para Hacienda. Sin embargo, el cumplimiento tardío de tus obligaciones fiscales se traduce en una multa de 100 euros. Por el contrario, si la Agencia Tributaria se ha tenido que poner en contacto contigo para recordarte que presentes la declaración, entonces la multa es de 200 euros.
Como puedes comprobar, sale más barato programar una alarma en el móvil que te recuerde que entre tus obligaciones de ciudadano ejemplar se encuentra la de estar al día con la AEAT. En el caso contrario te va a tocar rascarte el bolsillo.
¿Buscas una ayuda extra? En Vivus te ofrecemos un minipréstamos de hasta de hasta 1.000 euros (300 si es la primera vez que lo solicitas). Con nuestros préstamos podrás hacer frente a cualquier imprevisto que te pueda surgir. La solicitud es muy sencilla y rápida: ¡Diez minutos y sin apenas papeleo!