La festividad de Halloween se remonta a hace más de 3.000 años. En aquel momento, los pueblos celtas celebraban su año nuevo, conocido como Samhain, que significa el fin de la cosecha, en el equivalente al 1 de noviembre actual.
En la víspera de este festival, se creía que los espíritus caminaban por la Tierra mientras viajaban al más allá, junto con otras criaturas como hadas y demonios.
Desde entonces, el día de Halloween se ha expandido por todo el mundo, primero en los países anglosajones (especialmente Estados Unidos) y después en otros lugares de Europa y el resto de países civilizados.
Pero, ¿cómo se celebra Halloween en el mundo? Hagamos un pequeño viaje por diferentes países del mundo.
En México se celebra el Día de los Muertos, que desde 2003 es considerada como Patrimonio Inmaterial de la Humanidad por la UNESCO. En este país, las calaveras son las absolutas protagonistas, cuyo origen se remonta a la época precolombina.
Durante este día, se rinden ofrendas a los fallecidos y se elaboran los platos favoritos de los ausentes para atraer los espíritus, con ceremonias multitudinarias a las que acuden familiares y amigos.
Este folclore puramente mexicano ha llegado hasta muchas partes del mundo gracias al entretenimiento. Películas como Coco, de Disney Pixar o videojuegos como Grim Fandango han contribuido a expandir el Día de los Muertos por otras partes del mundo, aunque no tienen parangón con lo que se celebra en la actualidad en México.
La cultura celta está profundamente arraigada en Irlanda, y el Samhain no iba a ser una excepción. Por eso, la cuna del Día de los Muertos no podía ser otro país que Irlanda, donde se encuentra el origen de la celebración en el continente europeo.
Los irlandeses celebran Halloween a lo grande, con agendas de desfiles, fogatas, disfraces de todo tipo y cabalgatas. Hoy en día, la celebración tiene un carácter pagano en el que el dulce barmbrack es típico de ese día.
Además, para acompañar este dulce se prepara también Lamb´s Woos, que es una bebida a base de manzanas asadas.
Los irlandeses exportaron sus fiestas a América, especialmente Halloween, convirtiendo esta festividad en la más importante de todo Estados Unidos. A pesar de su carácter religioso, se imponen las calabazas, las calaveras y las telas de araña, junto con el naranja y el negro como colores oficiales.
Esta festividad se combina con el famoso truco o trato (trick or treat), que lleva a muchos niños disfrazados a llamar a la puerta de sus vecinos para pedirles chucherías y caramelos.
Además, Nueva York se ha consolidado como una de las ciudades de referencia para celebrar Halloween, ya que cada año se celebra un desfile multitudinario.
En Reino Unido, la festividad es exclusiva de los niños, y se le da mucha importancia al lado gastronómico. Sin embargo, cada vez más, los locales y restaurantes se han adaptado a esta tradición, decorando los escaparates, presentando dulces o preparando platos especiales de Halloween en los restaurantes.
Además, en Londres se lleva a cabo la London Zombie Walk, un desfile en el que pueden participar cualquier persona vestida de zombie para recorrer las calles más emblemáticas de la capital, en el que se visitan hasta 12 pubs. Además, se mezclan dos fiestas: el Festival de Samhain y el Pomona Day, de la diosa y los jardines de frutas.
Halloween empezó a ponerse de moda hace unas décadas, principalmente en Baviera. Muchas personas lo celebran asistiendo al Festival de la Calabaza en Retzer Land o recorriendo las antiguas ruinas del castillo Burg Frankenstein, que es donde comenzó la leyenda de Frankenstein.
Desde la década de los 90, muchas personas hacen fiesta con familia y amigos, mientras los niños van casa por casa pidiendo golosinas y caramelos a los vecinos.
En la India no se celebra el Día de los Muertos, al menos tal y como lo concebimos en Europa, debido a su cultura. En realidad, se celebra una fiesta hindú que es una conciliación con los ancestros.
Entre el 31 de octubre y el 1 de noviembre, los participantes invocan a los muertos con numerosas oraciones. De esta manera, los fallecidos quedan en paz hasta la próxima cita, que se celebrará 365 días después.
Toda la liturgia es puramente religiosa, ya que los familiares rezan a la diosa Durga para que mantenga alejados a los espíritus de los fallecidos.
En Madagascar se realiza una de las celebraciones más curiosas de Halloween. El 31 de octubre se hace la Famadihana, que se traduce como “el regreso de los muertos”.
Literalmente, los ciudadanos del país acuden al cementerio y sacan a los muertos de sus tumbas para posteriormente vestirlos y comenzar juntos un desfile con música para festejar la compañía de vivos y muertos.
Esta celebración no se realiza anualmente, sino cada 7 años, y es la oportunidad perfecta para que la familia pueda demostrar su amor y respeto a las personas fallecidas.
Hasta hace relativamente poco tiempo, España no celebraba Halloween, al menos no en su versión anglosajona. En nuestro país, la tradición era visitar los cementerios durante el Día de Todos los Santos, el 1 de noviembre que, además, es festivo. Una fiesta nacional puramente religiosa en la que se llevan flores a los cementerios.
Sin embargo, con el tiempo, y al igual que sucede en otros lugares de Europa, la fiesta de Halloween ha tomado protagonismo con una inclinación pagana. Los disfraces de Halloween se mezclan con dulces típicos como los buñuelos y fiestas de disfraces en casas y locales, que se decoran con calabazas y telarañas.
